La protección animal y las redes sociales

Ellos necesitan que los ayudes. No que los odien

La llegada del facebook y twitter ha resultado de mucha ayuda para quienes se dedican a rescatar animales y la difusión de mensajes sobre el tema. Muchos logros y resoluciones de problemas se han conseguido gracias a “tag”, una “publicación” o un “RT”.

Sin embargo, el mal uso de estas redes sociales no sólo le resta efectividad a lo que se publica, sino que también desprestigia al resto de los defensores animales y proteccionistas.

Revisemos algunos de los errores más comunes en los proteccionistas en facebook:

Crear perfiles para fundaciones: Los perfiles son para personas, no para compañías y mucho menos para fundaciones. Recibir una autorización de amistad de un no-humano es molesto y artificial. Facebook ha creado páginas que sirven perfectamente para estos temas, además ofrecen estadísticas y la posibilidad de hacer publicidad en su Ad Network.

Personas sólo con fotos de animales en su perfil: A las personas les gusta saber con quién mantienen contacto, Un perfil de alguien que no se puede reconocer, no es de confiar. Puede que en un principio haya sido aceptable o tolerable, pero después de tanto tiempo en FB terminas rechazando a estas personas.

Ser insistentes: Muchos reciben casi a diario una invitación para una página de alguna fundación y no las aceptan porque simplemente no les interesa, pero durante los siguientes 10 días diferentes personas (aparentemente de la misma fundación o de la agencia que les lleva las RRPP o la campaña de social media) insisten e insisten invitando a la misma persona a la misma página.

Invitación a eventos que no son eventos: La creación de una campaña para buscar donativos para un perro no es un evento. Usar el sistema de eventos para promocionar situaciones de tus rescates sólo te conducirá al block por parte de muchas personas. Además, comúnmente envían mensajes a personas que señalaron “no asistiré” en el evento.

Ser monotemático: El mundo de la protección animal tiene muchos campos, situaciones y eventos. Varía de vez en cuando, y si es posible con otros temas. De esta forma la gente no omitirá tus publicaciones en el inicio.

Publicar sólo malas noticias: Nadie, absolutamente nadie puedo soportar una avalancha de noticias trágica. Tienes que publicar situaciones agradables (videos, noticias, fotos) muy seguido. No amargues al mundo.

Publicar el mismo enlace en los muros ajenos: Si esto lo haces muy seguido sólo conseguirás que te odien, y el facebook te eliminará por invasión a la privacidad.

Taggear fotos a personas sin su autorización: Esta no es nueva, pero sí de las más molestas: una fundación o alguien me taggea en una foto donde no aparezco, sólo para que mis amigos lo noten o los visitantes a mi perfil lo vean en mi muro. Eso es simplemente una forma de spam. Por otro lado, la mayoría de estas etiquetas o tags se reparten entre personas que están en tu misma situación (con muchos perros o gatos por adoptar) y lo más probable es que lo único que logre la etiqueta sea comentarios como “qué lindo, pero no puedo”, “ojalá consiga hogar”, etc.

Usar el sistema de mensajes privados para enviar notas a muchas personas, como una cadena:El peor de todos. Es mejor crear un grupo y enviar mensajes a sus miembros, advirtiéndoles que si no quieren seguir recibiéndolos abandonen el grupo.

Algunos concejos en Facebook

1. Cuando publiques algo en el muro, agrégale un comentario personal. No sólo coloques el enlace. Pon algo atractivo, creativo, ocurrente para llamar la atención al posts.
2. No debatas en tu propio muro a menos que sea necesario: Si colocaste un post en tu muro y en los comentarios se abre un debate no participes, ya mostraste tu postura en el comentario.
3. Haz de tu muro un lugar de visita diaria: Coloca tips, noticias, notas, artículos, fotos y videos de interés, para que todos te visiten cada vez que se conecten. Así tendrás más oportunidad de dar tu mensaje.

En cuanto al Twitter la situación es distinta. Los errores más comunes en esta red son (Alt1040):

1.- Hacer de tu cuenta un spam continuo: Debes tener cuidado ya que si tomas una actitud “spam” y sólo escribes tweets de lo mismo aburrirás a las personas y éstas dejarán de seguirte. La clave está en saber equilibrar los mensajes sobre adopciones (alrededor del 20% de tus tweets) con aquellos que capten de una forma llamativa a los seguidores.

2.- No poner la información necesaria en tu perfil: Cuánto tiempo piensas dejar al huevo en tu cuenta? Por si no lo sabías, tu imagen de perfil es una carta de presentación muy importante a la hora de participar en Twitter por lo que, si insistes en dejar la foto predeterminada de la red social -que corresponde a este cuerpo redondeado- y no una personal o que te represente, nadie se interesará en seguirte. También, otro punto importante es completar tu biografía ya que es la manera en que las personas se hacen una imagen de ti.

3.- Seguir miembros desesperadamente: Seguir gente por sólo seguirla es un gran error. Lo cierto es que debes elegir con cuidado a quién le haces ‘Follow’ en Twitter ya que, en cierto modo, ellos también te representan. Es recomendable que aumentes las cuentas a las que sigues de forma paulatina. No sigas a famosos pensando que sus seguidores verán tus tweets cuando los mencionas, más bien busca que sea interesante para ellos seguirte.

4.- Olvidarse de la interacción: Como Twitter se basa en las relaciones que construyes y la comunicación que tienes con otros usuarios, es difícil que establezcas una red improtante de contactos y amigos si no interactúas. Por eso, es aconsejable que respondas a las preguntas que te hacen y aportes cuando otros tengan inquietudes o comentarios respecto de algo que te interese.

5.- No precuparse de la ortografía: Recuerda que comunicarte por esta red social no es como hablar con tus amigos por medio de Messenger o mensajes de texto, de modo que si descuidas tu ortografía la gente tendrá una impresión “poco profesional” de ti, como indican en Alt1040. Para evitar esto trata de fijarte en lo que escribes y cómo lo escribes; así los tuiteros te leerán con gusto.

6.- Publicar demasiados tweets: Hay quienes cometen el error de tuitear, literalmente, a cada segundo. Lo anterior, se da en aquellos usuarios que comentan desde el aire que respiran hasta el paso que dan, lo que se traduce en molestas actualizaciones de estado que alcanzan los 10 mensajes por cada par de minutos. El problema, es que si eres de estos miembros lo más probable es que rápidamente pierdas seguidores, por lo que es mejor enviar mensajes espaciados en el tiempo.

7.- Utilizar más de los 140 caracteres establecidos en Twitter: Si bien hay servicios que te permiten escribir mensajes que usen más caracteres, desde Alt1040 recomiendan utilizarlos sólo cuando sea necesario ya que los miembros de esta plataforma no están interesados en leer grandes “tratados de política” sino que en interactuar contigo. La clave está en ser práctico y sintetizar lo que quieres decir.

8.- No dar crédito a los tweets: En Twitter, muchas personas tienden a copiar tweets ingeniosos o de interés pero sin dar crédito a las fuentes… ¡Esto es casi un robo!. Lo mejor es que, cada vez que saques información de otras cuentas, cites a quien la publicó pues de este modo no sólo generarás una conexión con esa persona, sino que también quedarás como un tuitero confiable y honesto ante los demás.

9.- Pedir a otros que te sigan: ¿Sabías que no hay nada más desagradable que pedirle a otros tuiteros que te sigan? Debes recordar que Twitter no es una plataforma que te obligue a seguir a las personas de vuelta, ya que la clave está en que te hagan ‘Follow’ por lo interesante que eres para otros o por un lazo -familiar o de amistad- que te conecte con un tuitero determinado. Además, ten en cuenta que la filosofía del “sígueme y yo te sigo”, si bien te ayudará a aumentar seguidores, te terminará aburriendo con bots poco atrayentes o personas que no contribuyen en tu timeline.

10.- Pelear con otro tuitero: “Pelear en Twitter es tan inútil como pelear en Twitter”. Así describen en Alt1040 esta práctica que, más que satisfacción, te dará un gran dolor de cabeza. Lo cierto, es que cuando las personas se confrontan en esta red social suelen arrepentirse de sus dichos, por lo que es mejor respirar profundo, pensar en qué se va a decir y -algo muy importante- no gastar más de un tweet en responderle a nuestro ‘ciberoponente’.

Espero haya sido de mucha utilidad esta información